martes, 2 de diciembre de 2008

Puntos suspensivos nº 4

Malnacidos mercenarios de vuestros sentimientos, me clavais puñales por la espalda tantas veces como palmaditas me dais. Traicionais hablando de traiciones y simplemente llevais la razón a vuestro terreno. Os colgais medallas aún salpicadas con las lagrimas de sus consecuencias, y no os dais cuenta... No digais que no teneis armas y desenvainad, desenvaidad vuestra espada de prejuicios y atacad con vuestra mejor estocada, yo la parare con mi mano, y os aseguro que no me dolerá, pues ya no me queda sangre que derramar.

2 comentarios:

Amelie dijo...

Hablas de hipocresía, traición y prejuicios. Ante todo ello, no queda otra que colocarse un chubasquero y que todo resbale. Hacer lo que te de la gana hacer. Vivir la vida como te de la gana vivirla. Y ser feliz, pasando olímpicamente de lo que digan los demás.

De antes más dijo...

aaaaaaaaaaaaaaaaaaalaaaaaaaaa....




que radical te as vuelto!!!